¡Un roedor en casa!

Roedor en casa

Crecimos en hogares en los era aceptado tener un perro o un gato y hasta los pajaritos eran mal vistos porque eran “mascotas de viejita”, muy influenciados por Piolín y la abuelita.

A fines de los 90, comenzó el boom de los hámster y con ellos el horror de las mamás que escuchaban con cara de asco y miedo nuestras historias del compañerito nuevo que tenía uno.

Hoy en día, las mascotas se han diversificado mucho y tener un ratoncito ya no resulta tan descabellado como hace 20 años atrás, así que en esta nota te presentamos 3 roedores que puedes adoptar como mascota y sus principales cuidados.

Roedores buenos para tener como mascotas

Cobaya, Cuyi o Conejillo de indias

Estos adorables roedores se han ganado el corazón de muchos de nosotros con sus juegos y ternura. La cobaya es un animal herbívoro que se alimenta de pienso prensado, hojas verdes y pequeñas porciones de frutas.

Es importante que incluyas en la dieta de tu cuyi frutas ricas en vitamina C, como las naranjas y el kiwi, ya que al igual que los seres humanos, estos roedores no la producen de forma natural. Una dieta rica en Vitamina C ayudará a la prevención del escorbuto y mantendrá su salud en óptimas condiciones.

La presencia de heno en la dieta también es fundamental ya que, como buenos roedores, sus dientes crecen y crecen y necesitan algo con qué limarlos, el heno es además una súper buena fuente de fibra que mantendrá a tu cobaya con un metabolismo saludable.

Otro punto importante en el cuidado de las cobayas, es la regulación de las temperaturas altas; en verano debes poner especial atención a su exposición al sol y cuidar que no se deshidrate.

Debes tener en cuenta que las cobayas necesitan exposición solar, para la síntesis de vitamina D, pero siempre controlado.

Regula el tiempo de exposición y su hidratación y todo debería andar bien. Procura que su jaula sea espaciosa y déjalo salir cuando estés en casa.

Hámster

El sueño de todo niño es tener uno de estos simpáticos ratoncitos que parecen sacados de una animación japonesa. Una de las características de los hámster es la bolsita o saco que tienen en la boca para guardar alimento (sí, como las ardillas).

Algo muy importante a tener en cuenta antes de incluir un hámster en tu familia, es su tendencia a la actividad nocturna, por lo que su presencia puede ser un poco ruidosa cuando los humanos necesitamos descansar y claro, durante el día dormirá como un niño de pecho.

La dieta del hámster puede incluir semillas y frutos secos, además de algunos insectos como gusanos y saltamontes.

Ciertos alimentos como la coliflor, la betarraga o el chocolate pueden poner en riesgo la salud de tu roedor, así que infórmate bien respecto a sus prohibiciones alimentarias.

Respecto a su jaula, esta debe ser amplia, cómoda y además, debe incluir accesorios que le permitan ejercitarse y jugar, como una rueda o elementos para escalar.

Al igual que las cobayas, debes tener cuidado con la temperatura a la que expones a tu hámster; esta debe estar en un rango de 18 a 25°C.

Jerbo

Este pequeño ratoncito es sin duda una de las cosas más tiernas que puedes ver. Mide alrededor de 20 centímetros incluyendo su larga y característica cola.

Estos animalitos son ideales para elegirlos como mascotas, ya que son altamente sociables y juguetones, lo que lleva también a otra característica no tan deseable: no soportan estar solos, por lo que debes poner especial cuidado en su atención diaria y organizarte bien al momento de viajar o cumplir ciertos compromisos.

Otra característica relevante es que son altamente territoriales, por lo que debes respetar sus espacios y tratar de que aprenda a socializar con tus otras mascotas. Su dieta de basa en semillas, granos y cereales. Para la mantención de su pelaje, es necesario proporcionarles baños de arena con productos especializados que puedes obtener en tiendas de mascotas.

Como cuidados relevantes, tienes que saber que nunca debes tomar a tu jerbo por su cola ni tampoco alimentarlo con cítricos, ambas cosas podrías provocarle un daño grave en su salud.

Este roedor debe vivir en terrario, no en jaula, ya que una de sus actividades favoritas es cavar. Los mejores terrarios son los de vidrio, ya que necesitas que sea resistente a las mordeduras de este animalito.

Procura invertir en un terrario espacioso, lo que ayudará a que tu jerbo se desarrolle feliz y sin estrés.

Compartir: