Los gatos y el agua no se llevan muy bien, pero algunos insisten que el baño es primordial para conservar la higiene y la salud de los felinos. La discusión está desatada.
No es común ver un gato desaseado o sucio, a no ser que esté muy enfermo o que haya tenido un accidente. Aun así, los gatos en general se caracterizan por ser muy limpios gracias a su lengua áspera que actúa como una verdadera lija y elimina todo residuo de suciedad.
Para quienes han tenido gatos durante toda su vida, muchos han optado por dejarlos asearse ya que también es un buen indicador para corroborar su estado de salud. Sin embargo, esto se complementa con un cepillado diario de su pelaje, ya que al asearse con su lengua pueden acumular grandes cantidades que luego se transforman en bolas de pelo que quedan alojados en sus estómagos.
Para evitar estas molestias o la aparición de pulgas y garrapatas, muchos han preferido bañar con agua y shampoo especial para gatos, lo que termina o muy bien o en una pesadilla.
Los más expertos en lavado de felinos aseguran que la clave es acostumbrar desde pequeños al baño diario. Muchos indican que no es un proceso agradable, ya que siempre terminan con arañazos o con la misión del lavado inconclusa, pero que todo se olvida mientras que esta rutina sea constante en el tiempo.
Sin embargo, los gatos se caracterizan por tener un temperamento bastante salvaje. Si bien se trata de mascotas, los gatos aún mantienen su carácter agresivo y desafiante cuando se sienten amenazados, más aún si se trata de gatos que han sido abandonados o que han sufrido experiencias traumáticas con los humanos.
A pesar de que la discusión aún no llega a consenso, de igual forma hay que ser precavidos si tu decisión es bañar a tu gato en el baño. Un dato útil es iniciar este ritual después de los tres cuando esté vacunado y tenga sus defensas más altas.
También es aconsejable utilizar un shampoo especial para gatos y aplicar agua tibia. Si tu gato presenta alguna enfermedad, se recomienda suspender los baños hasta que se mejore.
Por otro lado hay otros productos que sustituyen al agua y al jabón de gato. Una opción es utilizar shampoo en seco y un cepillo para sacar los pelos sueltos.
También es necesario aplicar desparasitarios externos, para evitar las molestas pulgas y garrapatas que transmiten enfermedades y pueden producir alergias.
En Internet hay varios videos con consejos para bañar a su felino, lo cual también puede ser una gran idea si su intención es que esté más aseado y más bello. Sin embargo, nosotros recomendamos primero que conozca primero a su gato.
Si se mantiene aseado, no necesitará un baño. Si se trata de un gato rebelde capaz de atacar a quien se cruce por su camino ¡Menos! Lo importantes que usted y el gato estén a salvo y sin estrés de por medio.
